Presidente Piñera presenta Plan de Descarbonización de la Matriz Energética

4 JUN 2019
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S.E. el Presidente de la República, Sebastián Piñera, acompañado por las ministras de Energía, Susana Jiménez, y de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, presenta el plan de descarbonización de la matriz energética.

Muy buenos días:
 
Señora Intendenta, señor Alcalde, señoras Ministras, señor Ministro, señores Diputados y Senadores, dirigentes empresariales, amigas y amigos:
 
Uno de los riesgos, de los peligros más grandes que enfrentamos como humanidad es el calentamiento global y el cambio climático, y lo estamos sintiendo todos los días.
 
Y por esa razón, yo hoy día quiero hacer tres anuncios.
 
Primero, y gracias a un acuerdo, durante los próximos cinco años, vamos a sacar de la producción 8 centrales a carbón, que van a permitir una reducción en el aporte que hace el carbón a nuestra matriz energética de un 20%.
 
Y quiero apreciar y agradecer la colaboración de las empresas generadoras y el trabajo que ha hecho la Ministra de Energía y la Ministra de Medio Ambiente para lograr este gran acuerdo para Chile.
 
Pero eso no es todo. Tenemos también como una meta que, hacia el año 2040, la matriz energética de nuestro país esté descarboniza, es decir que no tengamos generación termoeléctrica en base a carbón.
 
Y, finalmente, el tercer compromiso es que, hacia el año 2050, Chile sea un país carbono neutral, es decir que todo lo que emitimos sea absorbido. Y para esto el aporte que va a hacer en avanzar hacia energías limpias renovables nuestra matriz energética, y el aporte que hace también el esfuerzo en materia forestal, son -entre otras- dos aspectos fundamentales.
 
¿Cuál es el compromiso que asumió Chile en la COP23 de París? Nos comprometimos a reducir en un 30% los gases de efecto invernadero por unidad de producto hacia el año 2030 en base a un año base, que fue el año 2007. Y vamos a cumplir ese compromiso y estos pasos que estamos anunciando hoy son la forma concreta y real de transformar palabras y compromisos en hechos y realidades.
 
Pero además de eso, para cumplir este compromiso el tema de hacer que nuestra matriz energética sea más limpia es fundamental. Hoy día el 78% de los gases de efecto invernadero se generan en el sector energía y el 26% en el sector energía basado en carbón. Y, por tanto, estamos enfrentando con estas medidas una de las principales fuentes emisoras de gases de efecto invernadero.
 
El carbón representa hoy día en nuestra matriz aproximadamente el 40% y creció significativamente después que se interrumpió la provisión de gas argentino, hace mucho tiempo. Y, por esa razón, el carbón, además, es energía base, tiene una particularidad, está disponible siempre. Por eso es muy importante que cuando hacemos medidas de esta naturaleza lo hagamos en forma gradual y en forma responsable.
 
Porque además de limpiar nuestra matriz energética, tenemos que preocuparnos de asegurar la provisión de energía y también preocuparnos de los efectos económicos que las distintas medidas pueden significar en materias como el factor trabajo. Y eso un tema que hemos considerado en forma muy especial, y está aquí el alcalde de Tocopilla: quiero decirle que es una consideración que hemos tenido permanentemente en las decisiones que estamos tomando.
 
Pero sustituir energía eléctrica en base a carbón por energía limpia y renovable, requiere también tomar en consideración la transmisión de esa energía. Porque las centrales a carbón pueden instalarse en muchas partes distintas, en cambio las energías limpias y renovables están básicamente determinadas por la naturaleza. Y, por tanto, su distribución física es distinta y requieren, en consecuencia, hacerse cargo no solamente de generar la energía, sino que también de transmitir, trasladar esa energía, desde donde se genera hacia los centros de consumo.
 
Y por eso es tan importante lo que logramos hace unos días, que fue la interconexión del Sistema Interconectado del Norte Grande con el Sistema Interconectado Central, a través de la nueva línea de transmisión que va desde Cardones hasta Polpaico.
 
Y esa línea, que son más de 1.000 Megas, que es lo que va a hacer, va a transmitir energía que se genera en forma limpia en el norte de Chile esencialmente, en base a la energía del sol, hacia los centros de consumo que están más en el centro y sur del país. Y eso cierra el círculo de esta transformación para hacerlo en forma gradual y en forma responsable.
 
En esto los voluntarismos o las quimeras, muchas veces, en lugar de ayudar sólo perjudican.
 
Pero además eso, el sistema eléctrico chileno actualmente tiene 28 centrales termoeléctricas a carbón. Están ubicadas en Iquique, Tocopilla, Mejillones, Huasco, Puchuncaví y Coronel, y tienen una antigüedad bastante menor si la comparamos con la antigüedad de las centrales a carbón de otros países como, por ejemplo, Alemania. De hecho, la primera central a carbón inició su operación el año 1964 y la última el año 2019, que era un proyecto que venía de antes y que entró en operación de acuerdo a la ley que rige esta materia.
 
Pero lo importante es que, de aquí en adelante, la tendencia fuerte y clara va a ser hacia descarbonizar nuestra matriz energética, para poder llegar, insisto, a bajar en un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero durante los próximos cinco años, llegar a descarbonizar totalmente nuestra matriz energética hacia el año 2040 y ser un país carbono neutral hacia el 2050.
 
Tres compromisos fuertes y claros, que yo estimo que son absolutamente necesarios y que, además, los estamos enfrentando en forma gradual y en forma responsable.
 
Por eso, cuando lanzamos la Ruta Energética 2018-2022, al comienzo de nuestro Gobierno, una de las principales tareas y preocupaciones que nos fijamos fue precisamente ésta: avanzar hacia la descarbonización de nuestra matriz energética. Y para esto funcionó una mesa que tuvo muchas sesiones de trabajo, en que estaban el Gobierno, los Ministerios de Energía y Medio Ambiente, las empresas generadoras, organismos que representan a los clientes de energía eléctrica, ONG ambientales, académicos, sociedad civil.
 
Y en esa mesa se discutió, se analizó, tomando en consideración, no solamente lo que es evidente, descarbonizar nuestra matriz energética, sino que también los temas de seguridad energética, tenemos que garantizar que vamos a tener la energía necesaria. Segundo, preocuparse de no alterar el precio de la energía. Además, los temas sociales, como qué pasa con las fuentes de trabajo, que esto puede poner en riesgo y prepararnos para recapacitar, reasignar trabajadores que están hoy día laborando en esas centrales termoeléctricas.
 
Y, por supuesto, todo esto es un equilibrio que no es fácil. Por eso, yo creo que la mesa hizo un gran trabajo, porque logró considerar todos los elementos, poniendo por delante el interés de todos por sobre el interés particular de cada una de las partes.
 
Y, por eso, los tres acuerdos que mencioné al comienzo, son tres acuerdos; algunos con fecha, con plazo; otros son un firme compromiso. Por eso, cada 5 años vamos a revisar y a analizar cómo continuar con medidas concretas de este Plan de Descarbonización.
 
La primera etapa es clara, concreta y muy precisa. Durante los próximos cinco años 8 centrales termoeléctricas van a dejar de operar: en Iquique 1, en Tocopilla 4, en Puchuncaví 2 y en Coronel 1. Y eso va a ser un aporte muy importante, porque nos va a permitir que -si no hubiéramos hecho nada- en lugar de estar emitiendo 30 millones de toneladas de CO2 equivalente, estos cambios nos van a permitir hasta el año 2040 reducir a sólo 4 millones de toneladas. O sea, estamos haciendo un aporte muy significativo a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y también a reducir las emisiones de contaminación local.
 
Por esa razón, las centrales que van a dejar de operar van a poder quedar por un plazo de 5 años en un estado operativo de reserva estratégica.
 
¿Qué significa eso? Que van a poder ser llamadas, si tenemos cualquier problema en materia de generación de energía, estas centrales van a estar como reserva estratégica. Ojalá no tengamos que llamarlas, pero si fuese necesario, un Presidente tiene que preocuparse de asegurar la provisión de energía para el desarrollo de las empresas, de los hogares y de nuestro país.
 
Y, finalmente, quisiera terminar estas palabras planteando que esto no es todo, porque además de este esfuerzo de descarbonización estamos avanzando en muchos otros frentes para legarles a nuestros hijos un país más limpio. Entre ellos el avance significativo que estamos impulsando en materia de electromovilidad, reemplazando las fuentes de energía basadas en combustibles fósiles, principalmente petróleo, por la fuente de energía eléctrica y, por tanto, teniendo un sistema de transporte público más limpio, más seguro, menos contaminante, menos ruidoso y que presta un mejor servicio a los pasajeros.
 
La eliminación de las bolsas plásticas, que nos va a permitir terminar con este fenómeno porque ya, muy pronto, vamos a tener más bolsas plásticas que peces en el océano. Ésa fue una medida muy pionera, muy precursora que tomamos en nuestro país y vimos que la reacción de las personas fue extraordinaria: comprendieron perfectamente bien el significado, el sentido y el objetivo de esta medida, y colaboraron con ella en forma bastante ejemplar.
 
Todo lo que estamos haciendo en promover energías renovables no convencionales. Chile fue pobre en las energías del pasado -gas, carbón, petróleo- pero es rico en las energías del presente y sobre todo en lo que es potencial que tenemos hacia el futuro, con la energía del sol, del viento, del mar, de la geotermia.
 
Estamos también haciendo un enorme esfuerzo por aumentar nuestra base y nuestro stock de bosques. En el mundo entero los bosques se están achicando, en Chile los bosques están creciendo; es de los pocos países del mundo que está aumentando su masa de bosques y eso es un fenómeno maravilloso de la naturaleza.
 
Los que contaminan transforman oxígeno en CO2, los bosques transforman CO2 en oxígeno y son un gran complemento. Esto junto con el mar, que absorbe buena parte de los gases de efecto invernadero, son dos grandes aliados en esta lucha de la humanidad contra el cambio climático y el calentamiento global.
 
El plan de protección de los humedales, que anunciamos con la Ministra de Medio Ambiente hace algunas semanas en Valdivia. La ley que castiga los Delitos Ambientales, de forma tal de ir creando una cultura de mayor respeto y protección de nuestro medio ambiente. Y la Ley que pronto enviaremos al Congreso, que se denomina Ley Marco del Cambio Climático.
 
Todos estos son pasos concretos y reales que estamos dando como Gobierno porque sentimos que no es solamente nuestro derecho, es nuestro deber. Por eso, Chile está cumpliendo con su compromiso y éste es un compromiso moral, no solamente con nosotros, no solamente con la naturaleza, el principal compromiso que estamos cumpliendo, de naturaleza moral, es con nuestros hijos, nuestros nietos y los que vendrán.
 
Porque el mejor legado que podemos entregarles a nuestros hijos, es un país más limpio, que el que nosotros recibimos.
 
Muchas gracias.