CHINA - Presidente Piñera participa de Foro de Cooperación Internacional “Una Franja Una Ruta”

26 ABR 2019
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El Mandatario aseguró que el objetivo de esta iniciativa debe ser establecer y crear espacios de colaboración que permitan mejorar la capacidad de crecimiento, desarrollo y de mejoría de la calidad de vida de los países. Agregó que Chile está preparado para transformarse en una puerta de entrada de Asia a América Latina.

Muy buenos días:
 
Estoy muy contento de participar en este II Foro de La Franja y La Ruta, un proyecto ambicioso, pero también factible, que busca impulsar la cooperación, la integración y encontrar la manera de unir fuerzas para mejorar la calidad de vida de nuestros pueblos. Pero, además, porque coincide este Foro con los 70 años de la fundación de la República Popular China.
 
Acabamos de escuchar al Presidente Xi Jinping establecer los principios que orientan esta iniciativa: el libre comercio, el respeto a la propiedad intelectual, la apertura de los mercados, el multilateralismo y la necesidad de modernizar la OMC para tener un comercio sobre la base de reglas acordadas, y la competencia leal entre los países. Esos son los principios que tenemos que fortalecer.
 
Y hoy día, en que estamos aquí reunidos más de 100 países y más de 40 Jefes de Gobierno o Jefes de Estado, es muy importante ratificar estos principios.
 
China es una cultura milenaria, de más de 5 mil años de historia, y durante muchos años, miles de años, fue la primera potencia mundial. El mundo occidental, hasta Marco Polo, no lo sabía, porque no conocía China, y hoy día China está emergiendo nuevamente como una gran potencia mundial, y no solamente en el campo del desarrollo y el crecimiento económico, también en el campo del desarrollo y la integración social, y desarrollando una formidable capacidad de innovación y de emprendimiento en todos los campos de la ciencia y la tecnología.
 
La Franja y La Ruta es, indudablemente, una iniciativa que va a aportar al crecimiento y al desarrollo de nuestros países, y al bienestar de nuestros pueblos, especialmente hoy día, en que vivimos tiempos de mucho escepticismo y de muchas dudas, producto del menor crecimiento y también de niveles excesivos de desigualdad. Se ha puesto en duda las bondades del libre comercio, del multilateralismo, y algunos países están reaccionando con medidas proteccionistas que -yo estoy convencido- no son la mejor solución para los problemas que el mundo enfrenta hoy en día.
 
Y muchos de los principales impulsores o impulsores iniciales del libre comercio, hoy día lo están poniendo en duda.
 
La Franja y La Ruta es una oportunidad para que en estas circunstancias todos nosotros podamos fortalecer nuestro compromiso y practicar ese compromiso con la colaboración, el multilateralismo y el libre comercio.
 
Una de las grandes ventajas de la Iniciativa de La Franja y La Ruta es que trabaja sobre áreas muy específicas y sobre proyectos muy concretos. Es muy parecido a lo que hemos estado haciendo en América Latina con la Alianza del Pacífico, con la creación de PROSUR; se trata de establecer y crear espacios amplios de colaboración, en base a acuerdos que permitan mejorar la capacidad de desarrollo de nuestros países y de mejoría de la calidad de vida de nuestros pueblos.
 
En sólo cinco años, la Iniciativa de La Franja y La Ruta ha tenido frutos muy fecundos. Y China hoy día, sin duda, bajo el liderazgo del Presidente Xi Jinping, está haciendo un esfuerzo por promover ese clima de mayor entendimiento, colaboración entre los países.
 
Y hay dos principios básicos que deben orientar la iniciativa de La Franja y La Ruta. El primero es la transparencia, que las cosas se hagan en forma clara porque no hay mejor policía que el alumbrado público, ni hay mejor desinfectante que la luz solar. Y el segundo es el respeto a las realidades, legislaciones e identidades propias de cada uno de los países que participan de esta iniciativa.
 
Chile ha sido, es y va a seguir siendo un gran creyente e impulsor del libre comercio y del multilateralismo. Lo hemos demostrado con nuestra participación en APEC; también, con nuestra participación en ASEAN; en el Tratado de Libre Comercio Inter-Pacífico; y, también, con nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sustentable 2030.
 
Y La Franja y La Ruta se inspiran en principios muy similares a los que orientan la política exterior de mi país.
 
Por esa razón, quiero aprovechar esta oportunidad para invitarlos, porque Chile va a ser sede de la Cumbre de APEC, en noviembre de este año, y sede de la Cumbre de la COP, en diciembre de este año, donde tendremos que renovar y fortalecer los compromisos que se lograron en la Cumbre de París.
 
Porque todos sabemos que, si no corregimos el rumbo, lo que está ocurriendo con el cambio climático y con el calentamiento global puede terminar en una tragedia. Un presidente dijo que somos la primera generación que está sintiendo los efectos del cambio climático y agregó, también, que somos la última generación que podemos hacer algo para evitar que este cambio se transforme en una tragedia.
 
Y es por esa razón que la Cumbre de COP25 en Chile va a poner énfasis muy especial en la protección de la Antártica, el continente blanco, el continente puro, el continente del futuro, y en la protección de los océanos porque sin azul no hay verde y sin verde no hay vida.
 
Finalmente, yo quisiera establecer mi deseo y compromiso para que el desarrollo futuro de La Franja y La Ruta mantenga ese carácter flexible, inclusivo y abierto; ese énfasis en lograr un crecimiento integral, inclusivo y sustentable, que sea respetuoso de la naturaleza y, también, de las generaciones futuras, porque nuestros hijos y nuestros nietos nos van a pedir cuenta de cómo esta generación ha enfrentado y seguirá enfrentando los problemas del cambio climático, del calentamiento global y del daño a nuestra naturaleza.
 
Por todo eso, quisiera terminar mencionando que La Franja y La Ruta es el renacimiento de una iniciativa muy antigua, que se llamó la Ruta de la Seda, que comenzó en el siglo I A.C. conectando a China con Mongolia, India, Persia, Siria, Turquía, Europa y África, donde se transaban todo tipo de bienes y se generó un gran mercado. Ese mercado se amplió porque este año vamos a celebrar los 500 años de la primera vuelta al mundo que hizo Hernando de Magallanes y que descubrió, para el mundo occidental, porque el mundo americano conocía el Estrecho de Magallanes.
 
Y, por eso, Chile está preparado para transformarse en una verdadera puerta de entrada del Asia al mundo de América Latina, y esperamos que después de estos dos días de deliberaciones, dónde vamos a poder conversar y analizar muchos temas, podamos dar un mensaje de optimismo y de esperanza al mundo entero, y de fortalecimiento de los valores de la colaboración, el libre comercio y el multilateralismo.
 
Muchas gracias.