S.E el Presidente de la República, Sebastián Piñera, junto al Ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, pone en marcha para el tránsito vehicular y de peatones el Puente Cau Cau en Valdivia.
Muy buenas tardes:
Esperamos en Santiago, con el aeropuerto de Valdivia cerrado, pero con la plena fe y esperanza de que íbamos a tener este maravilloso día de Sol.
Decir que éste es un día muy especial, no solamente para los valdivianos, es un día muy especial para todos los que siempre tuvimos fe en que el Puente Cau Cau iba a ver la luz del Sol, como la está viendo en esta maravillosa tarde.
Para mí, venir a Valdivia siempre es una inspiración, es como alimentar el espíritu, es como oxigenar la mente. Por algo don Pedro de Valdivia, que fundó muchas ciudades en Chile, reservó su nombre para esta ciudad de Valdivia, la bautizó como “Santa María la Blanca de Valdivia”, y hoy día está haciendo honor a su nombre.
Y además de eso, escogió fundar esta ciudad en una región bendita por Dios. La cordillera, los volcanes, los ríos, los bosques, los lagos, hacen de la Región de Los Ríos una región que no tiene nada qué envidiarle a ninguna otra región en Chile o en el mundo.
Pero además, esta región ha demostrado, a lo largo de su historia, una capacidad de resiliencia, de fortaleza, de capacidad de volver a ponerse de pie, que emociona e inspira.
Podemos recordar lo que ocurrió después del incendio de 1909, después del terremoto de 1960, que sigue siendo el terremoto más grande que se conozca en la historia conocida de la humanidad, con 9,6 grados en la escala de Richter. Pero siempre los valdivianos, después de la adversidad, saben secar las lágrimas, arremangarse las mangas y volver a ponerse de pie.
Y yo pienso que eso es lo que ha inspirado esta historia, larga historia, del Puente Cau Cau, que por fin -y yo sé que interpreto a todos los valdivianos- está viendo la luz del Sol.
Cau Cau significa, en mapudungun, “Gaviota grande”, y nosotros no podíamos permitir que esta gran gaviota terminara como una muestra de un proyecto que nunca vio la luz del Sol y que terminó en fracaso.
Por eso, la voluntad, la actitud, la perseverancia para enfrentar todas las dificultades, nunca abandonó el espíritu de nuestro Gobierno. Apenas llegamos al Gobierno nos pusimos a trabajar en buscar la solución a los problemas del Puente Cau Cau, no quedarnos llorando sobre la leche derramada o culpándonos los unos a los otros, sino que sentíamos que el mejor servicio que le podíamos prestar a esta región y a esta ciudad de Valdivia era encontrar la solución al Puente Cau Cau, y de esa forma volver a conectar el norte con la Isla Teja y también con la costa, e impedir que tantos vehículos tuvieran que pasar por el centro de la ciudad de Valdivia, congestionando más esta ciudad.
Y, de hecho, esa fue la razón por la cual se pensó, se soñó, se planificó el Puente Cau Cau.
Hoy día va a permitir el tránsito de cerca de 2 mil vehículos al día, con un peso máximo del orden de las 5 toneladas, y va a permitir, naturalmente, descongestionar el Puente Pedro de Valdivia, y sabemos -y ya está el diseño y en pleno trabajo- la construcción de un tercer puente, el Puente Cochrane, y algún día, y también estamos trabajando en eso, el Puente Torobayo-Las Mulatas.
Pero lo importante hoy día es que este puente que estamos viendo, que tuvo que soportar muchos exámenes y exigentes pruebas, está permitiendo que los autos circulen, y va a significar, sin duda, que muchas actividades, no solamente el turismo, el tránsito de vehículos de pasajeros, de vehículos de carga hasta cierto peso, y esto significa, sin duda, una muy buena noticia para la ciudad de Valdivia.
Y estamos muy conscientes que durante cuatro años los valdivianos esperaron con ansias este día. Pero finalmente el día llegó, y eso es lo que importa. Y a pesar de todas las frustraciones, humillaciones, finalmente hoy día estamos inaugurando, en forma preliminar, el funcionamiento de este puente.
Y lo hicimos con un sentido de responsabilidad, con un sentido de compromiso y con un sentido de urgencia.
Esta apertura provisoria del Puente Cau Cau, no es algo que se ha hecho en base a voluntarismo o en base a improvisaciones. No. La verdad que es una decisión que fue responsablemente tomada, después de trazarnos metas, desde el primer día, muy claras y concretas.
De hecho, el plan para restablecer el funcionamiento del Puente Cau Cau tuvo tres etapas: la primera, la anunció el ministro Juan Andrés Fontaine, el 26 de abril, y consistió en ver si podíamos subir y bajar los brazos en forma eficiente y en forma segura; la segunda etapa fue comprobar si los brazos del puente podían dejar pasar las embarcaciones, usando provisoriamente gatas hidráulicas, y eso se cumplió el 31 de julio; la tercera etapa fue conocer los resultados de un informe que se encargó a una conocida y prestigiosa empresa internacional, experta en puentes basculantes, y que se cumplió el 8 de agosto.
Y, por tanto, seguimos todos los pasos para poder hoy día compartir con los valdivianos esta gran fiesta, esta gran felicidad de la inauguración provisoria del Puente Cau Cau.
Hoy estamos evaluando diferentes alternativas para una solución definitiva para el Puente Cau Cau, y vamos a comunicar muy oportunamente, y con mucha transparencia, como lo hemos hecho, los resultados de estos estudios, porque los valdivianos tienen derecho a saber cómo vamos a resolver en forma definitiva el problema que significó para ellos el Puente Cau Cau.
Quiero terminar estas palabras agradeciendo, felicitando de corazón a todas las personas que hicieron posible esta solución: a los trabajadores, a la Armada de Chile, a Carabineros, a la Municipalidad de Valdivia -y aquí está su alcalde-, a los equipos de los ministerios de Transporte y Obras Públicas, al ministro Juan Andrés Fontaine, a la ministra Gloria Hutt, porque sin el trabajo de ellos hoy día no estaríamos disfrutando esta tarde de Sol.
Y termino recordando una anécdota de la historia nacional.
El Presidente Barros Luco -muy conocido por muchas de sus historias y sus anécdotas- le decía a su gabinete “señores, en la vida hay dos tipos de problemas: los que se resuelven solos, no hay nada qué hacer; los que no tienen solución, tampoco hay nada qué hacer”. Y los invitaba a ir a jugar cacho.
Yo no estoy de acuerdo con el Presidente Barros Luco, yo creo que en la vida hay dos tipos de personas: los que se resignan frente a los problemas con fatalismo y no hacen nada, y los que los enfrentan con decisión, con voluntad y con coraje.
Y yo creo que fue la decisión, la voluntad y el coraje con que hemos enfrentado los problemas del Puente Cau Cau, lo que nos permite hoy día estar inaugurando este puente tan querido, tan necesitado, tan esperado por la gente de Valdivia.
Y espero, pronto, muy pronto, poder dar una solución definitiva a este Puente Cau Cau, y no solamente al Puente Cau Cau, porque estamos muy conscientes de los problemas de conectividad que tiene la Región de Los Ríos, por eso hablábamos de una ampliación del Puente Pedro de Valdivia, de la construcción del Puente Cochrane y, eventualmente, estamos en diseño el Puente Torobayo-Las Mulatas.
Y eso es parte de nuestro proyecto para la Región de Valdivia, porque sabemos que muchas otras áreas van a requerir grandes proyectos de inversión, particularmente en el sector de Salud, donde tenemos y vamos a anunciar próximamente un ambicioso y necesario plan de construcción de hospitales, de consultorios y Centros de Salud Familiar.
Así que, yo estoy seguro que este Sol anticipa, presagia tiempos mejores para la Región de Los Ríos y para la ciudad de Valdivia.