S.E. el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, encabeza la inauguración del Parque de Almacenamiento de Energía Solar Bess Coya.
Muy buenas tardes a todos y todas las presentes:
Les agradezco mucho las palabras a las representantes de la empresa y valoro mucho su intento por hablar español. Me alegra que se haga el esfuerzo por aprender nuestra hermosa lengua. Saludo a las autoridades y, sobre todo, a los trabajadores y trabajadoras de Engie y a los contratistas.
También me gustó y hago notar el detalle este trabajo con emprendimientos locales. No sé si vieron que ahí ponen el Instagram de algunos emprendimientos locales, para que le echen una mirada. Es muy importante aportar a estos emprendimientos de la zona.
Este es un proyecto que me da mucha alegría porque es un proyecto con sentido que va más allá del proyecto mismo. Estamos hablando de cómo avanzar en descarbonización y cómo enfrentar uno de los principales desafíos que tiene la humanidad, la crisis climática.
Y Chile, pese a que somos un país que aporta relativamente poco en la emisión de gases contaminantes, somos uno de los pioneros en varias iniciativas que apuntan en la dirección de enfrentar la crisis climática. El camino, en particular, hacia un Chile libre de carbón es nuestro compromiso con el planeta y es una tarea que como Gobierno hemos asumido con muchísima convicción.
Pero esta meta va a ser sólo posible si logramos trabajar en conjunto el sector público y el sector privado. En esa lógica, agradezco mucho a un grupo como Engie que es aliado en este esfuerzo, porque el sector eléctrico y sus logros en materia de transición energética son claves para el cumplimiento de las metas climáticas y ambientales que nos hemos impuesto como país y que no hemos impuesto como humanidad también, en particular desde la COP 25 en París. Además, vamos a tener una muy importante actualización de la COP en Belém do Pará prontamente en Brasil.
¿Qué es lo que estamos inaugurando hoy? Estamos celebrando la apertura del Parque de Almacenamiento de Energía Solar Bess Coya, que es una pieza más de nuestra importante infraestructura energética y un testimonio tangible que se puede ver del compromiso de Chile con el futuro energético sostenible y renovable. Además, en una comuna chica, pero tremendamente importante del Norte, como es María Elena. Una comuna que nos ha dado mucho como país a lo largo de nuestra historia y que hoy se constituye como una de las comunas pilares en las energías renovables no convencionales.
Este parque, además, nos enorgullece porque es el más grande de su tipo en América Latina, es también, como destacaba Catherine en sus palabras, una prueba más del liderazgo de Chile en materia de transición energética y del buen trabajo de colaboración entre el sector público y el privado. Nos decían Pablo y Juan antes que el avance en plantas como esta o la que se está construyendo en Tocopilla tienen que ver con una apuesta que hizo Engie a que iba a lograr empalmar su inversión con el avance de la regulación en Chile.
Eso es algo que logramos cumplir también desde esos desafíos que nos impusimos y que justamente los logramos cumplir desde el Gobierno. Conversamos en París, hace un año aproximadamente, de los desafíos y problemas que estaba teniendo la industria, en particular en materia de almacenamiento eléctrico y era tremendamente desafiante el poder resolverlos porque implicaba pasar por un Congreso que, sabemos, no es fácil, es muy difícil ponerse de acuerdo en el Congreso.
Y, sin embargo, con trabajo conjunto, con seriedad, con rigor técnico, pero también con voluntad política, lo logramos y hoy podemos inaugurar esto que, además, ha dado mucho empleo durante su construcción, pero que es tremendamente significativo para la matriz energética de Chile.
Esta planta contiene energía solar que procesa la planta fotovoltaica a través de 232 contenedores y permite almacenar 638 mega watts por hora, evitando así la emisión de más —y esto es lo importante— de más de 65.000 toneladas de dióxido de carbono al año.
Y esto, además, se hace con litio chileno, pero acá está el desafío: sacamos el litio, el litio se va a otros países, a China o puede ser a Estados Unidos, y vuelve en forma de batería. El desafío que tenemos en el proceso de industrialización que estamos llevando adelante como Gobierno y como una política de Estado es que en el futuro cercano esas baterías se produzcan en Chile. De esa manera, poder generar encadenamientos productivos virtuosos que ayuden a recuperar la industria de nuestro país.
Chile no es solamente un país exportador de energía o de materias primas. Chile es un país que cuenta con conocimiento, que cuenta con tecnología, que cuenta con trabajadores y trabajadoras que están capacitados para ir más allá. Por eso, nos autoimponemos ese desafío.
Como bien se decía en las palabras anteriores, acá hay un compromiso con la descarbonización. Esta no es la primera vez que estoy con Catherine y con Rosaline, en particular. Con Rosaline y con los trabajadores y trabajadoras estuvimos en Tocopilla cerrando una termoeléctrica, en una decisión que no fue no fue fácil. Y cuando se cerró esa termoeléctrica, en el marco del Plan de Descarbonización de Chile y también del compromiso de Engie de avanzar hacia el 2026, —los desafíos del país son de otras de otras dimensiones— en una transición justa. ¿Qué significa una transición justa? Que el cambio en la matriz energética no sea a costa de los trabajadores.
Y hoy podemos dar cuenta, pero es una decisión que ellos tomaron hace un tiempo, que se va a realizar una inversión tremendamente importante, una inversión grande, en Tocopilla para construir una de estas plantas de almacenamiento que, además, va a permitir dar trabajo y se va a hacer en el mismo lugar en donde estaba esta termoeléctrica. Ahí hay un ejemplo virtuoso de cómo podemos avanzar en la transición energética, en conjunto con las y los trabajadores.
Nosotros somos el segundo país del mundo, después de Fiyi, que se impuso la meta, por ley, de ser carbono neutral de aquí al 2050. Y siempre lo digo, no me cabe ninguna duda de que vamos a llegar antes a la meta.
Esta no es una mirada solamente de futuro, es una mirada de presente. Hemos visto cómo Chile es uno de los países más afectados por las consecuencias de la crisis climática, lo hemos visto en particular en los incendios y en las inundaciones, y también en la sequía. Por lo tanto, enfrentarla es un deber moral de nuestra época, de nuestra generación, y en Chile lo estamos haciendo.
Como muchos saben, además, hoy se encuentra en el Congreso el Proyecto de Ley de Transición Energética. Este proyecto, tal como lo fue el de Estabilización de Tarifas Eléctricas, es fundamental para continuar avanzando en materias tan relevantes como agilizar la puesta en marcha y el desarrollo de proyectos de transmisión eléctrica, y, en particular, de sistemas de almacenamiento, donde teníamos un cuello de botella.
Por ello, hago un llamado a los parlamentarios y parlamentarias a que actuemos con unidad, con decisión y con determinación en algo de lo que estamos orgullosos como chilenos y chilenas, que hemos logrado hacer de la energía una política de Estado que no está, en general, sometida a los vaivenes diarios de la trinchera política, sino que se piensa en el largo plazo. Por eso, espero que podamos aprobar esta ley que permita asegurar un legado de prosperidad y sostenibilidad para las generaciones venideras, porque el mundo y el territorio que ocupamos no es solamente nuestro y lo podemos ocupar como si no hubiese mañana, tenemos que legarles un futuro sostenible a las generaciones que vienen.
Hoy, celebro la inauguración de este parque de almacenamiento de energía, celebro el poder de la visión, la innovación y el compromiso por poder transformar el mundo de manera responsable, celebro la colaboración público-privada, celebro la presencia de trabajadores y trabajadoras, celebro la interculturalidad de este espacio y, por cierto, que esta planta, que este lugar sea un faro de esperanza y un recordatorio constante de que cuando trabajamos juntos, un futuro mejor nos aguarda.
Muchísimas gracias y cuenten con nosotros para seguir adelante en esta misma línea.