S.E. el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, se reúne con vecinas y vecinos afectados por los incendios en Quilpué.
Muchas gracias Aida. Estamos en su terreno, acá está emplazada la casa de Aida y don Ángel, con quienes estuvimos conversando antes y, también, con varios vecinos de este sector de Quilpué, en donde nos contaban lo duro de la tragedia, pero también la esperanza de la reconstrucción. Y en el camino de la reconstrucción y el apoyo a la emergencia, qué cosas se pueden hacer mejor.
Estuvimos conversando con ellos respecto a cómo el Estado ha llegado a apoyar en la emergencia, en particular el Bono de Acogida. Quienes están hoy con nosotros son parte de los más de 6 mil beneficiarios del Bono de Acogida. Hemos tenido la oportunidad ahora de revisar cuánto se ha avanzado y de analizar lo que hace falta por hacer.
Nos contaban cuánto han subido los arriendos en la zona, nos contaban los problemas de qué es lo que pasa con las familias que son más numerosas, en el caso de las contribuciones que están pagando, los terrenos que fueron incendiados, cómo se puede hacer. Lo estuvimos conversando acá con la ministra encargada de la reconstrucción, Javiera Toro.
Así que, nos vamos con harta pega, pero conscientes también –y esto es importante decirlo– de que se han hecho hartas cosas. Y acá quiero reconocer a todos los que han trabajado, primero partiendo por los vecinos y vecinas que, desde el primer momento, se pusieron la mano en el corazón, incluso gente que había perdido su casa y muchas cosas se pusieron a ayudar a quienes más lo necesitaban. Y ahí, una vez más, se ha notado la solidaridad de Chile y espero que esa solidaridad se mantenga en el tiempo.
También, a todos quienes ayudaron y colaboraron en la emergencia, a todas las instituciones que colaboraron en emergencia. Reconozco especialmente a los municipios y a los trabajadores municipales, acá estamos con la alcaldesa de Quilpué, Valeria Melipillán, que me consta, han trabajado hasta quedarse sin pestañas y están permanentemente recorriendo el territorio, enfrentando las tensiones que hay también en una tragedia de estas características, que es humanitariamente muy grande. No perdamos la perspectiva de aquello.
Y es que hay quienes dicen muy livianamente que aquí no se ha hecho nada y les quiero decir que eso no es cierto. Siempre hay cosas que se pueden mejorar, hay lugares donde se podría ser más eficiente. Frente a una catástrofe de estas características siempre van a haber necesidades que aún no se han cubierto, pero que estamos haciendo el máximo esfuerzo por llegar.
Pero no es cierto que no se ha hecho nada. Inmediatamente después de ocurrida la emergencia, nos enfocamos en lo urgente, que era apagar el fuego, salvar vidas e identificar a los fallecidos. Aplicamos rápidamente la Ficha Básica de Emergencia a cerca de 8 mil lugares afectados, lo que nos permitió llegar con las ayudas tempranas.
Nos preocupamos, en conjunto con Carabineros y las Fuerzas Armadas, de garantizar la seguridad en los sectores que fueron afectados.
Hemos terminado las labores de remoción de escombros y despeje de las calles de Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana, fueron más de 85 mil toneladas de escombros retirados, de los cuales más de la mitad ya llegaron a su destino final.
Se han ido restableciendo progresivamente los servicios básicos en los lugares en que estaban las condiciones para ello y se ha garantizado el acceso a agua potable en todos los sectores afectados.
También, kits de empalme eléctrico de emergencia. Pero ahí, lo que hemos conversado con las alcaldesas, hoy con el Jedena, con el Gobernador y con las familias es que, en materia en particular de alumbrado público, hay que ir más rápido. Es necesario que todas las calles estén iluminadas a la brevedad.
Hoy el Ministerio de Energía le presentó una carta Gantt de reposición, porque la red eléctrica ya está, pero faltan las luminarias en algunos sectores. En Quilpué se presentó hoy la carta Gantt, para Viña del Mar me lo van a presentar hoy en la noche. Pero le he exigido al ministro de Energía que en eso pongamos el pie en el acelerador y que se utilice lo que corresponde en el marco de una emergencia. Tenemos un decreto de emergencia y en esto las empresas también se tienen que poner a disposición para poder trabajar con más ahínco en poder solucionar esto.
También ya se han pagado 7.870 bonos de recuperación. Acá tenemos varios casos de personas que han perdido todo y que ya les llegó, en los primeros momentos de la emergencia, el bono de $1 millón 500 mil que ha servido para poder comprar enseres, en las casas que arriendan para poder pagar el mes de garantía, para poder hacerse cargo de lo más urgente.
Más de 6 mil familias han recibido algunas de las soluciones transitorias de habitabilidad disponibles y, además, ya se está pagando el Bono de Acogida que les permite a las personas, ya sea, tener un aporte importante para poder arrendar o, también, para pagarle a algún familiar, en los casos en que han ido donde algún familiar, para poder aliviar la carga que significa el acoger temporalmente a nuevas personas en la casa.
Además, hoy en la mañana ustedes vieron que ya pagamos el Bono Uniforme Escolar a más de 3.400 estudiantes con $100 mil a cada uno de ellos y se comenzó con la entrega masiva de servicios de cuidados a personas mayores y reposición de ayudas técnicas a personas con discapacidad; bastones, sillas de ruedas, edredones, camas, entre otras cosas que necesitan personas con discapacidad. Además, por cierto, el kit escolar, las mochilas que entregamos hoy en la Escuela Ministro Zenteno.
Todo esto es en el contexto de la emergencia que, como pueden ver ustedes, todavía está muy vívida, pero la reconstrucción demora. Y quiero ser muy claro, la reconstrucción definitiva toma tiempo.
Estuvimos en una reunión importante recién con el Jedena, con las tres alcaldesas, Javiera Toledo, Valeria Melipillán y Macarena Ripamonti; con la encargada de reconstrucción, Javiera Toro; con el gerente de la reconstrucción, Patricio Coronado, con la ministra enlace con el Gobierno durante estos días, la ministra Camila Vallejo; con el ministro de Vivienda, Carlos Montes; con la gente del Ministerio del Interior; y con el director nacional de Senapred justamente para poder afinar el proceso en donde pasamos de la atención de la emergencia y las soluciones transitorias a la reconstrucción definitiva.
Les quiero pedir a todos que se hagan una idea de que, por ejemplo, todavía tenemos infraestructura que, a la fecha, no se ha terminado de recuperar del terremoto del 2010 o del terremoto de Coquimbo del 2015. Entonces, les pido que ante un desastre de estas características se tenga perspectiva de lo difícil que es, pero no les quepa duda que se van a agotar todos los esfuerzos por sacarlo adelante. Por eso, vamos a estar siempre, permanentemente –y nuestros equipos así lo han demostrado y las alcaldías también– en el territorio conversando con la gente, viendo dónde falta para apretar más, para ir más rápido, para poder cambiar las cosas que no estén funcionando y hacerlo mejor.
Estas no son promesas vanas, les decía que hay muchas cosas que ya se han cumplido. La urgencia hoy y en donde están enfocados los principales esfuerzos es en el techo. De aquí al invierno, a que partan las lluvias, todas las familias afectadas tienen que tener un techo donde resguardarse. Esas son las viviendas de emergencia o algunas de las alternativas de las que van a dar cuenta las autoridades correspondientes, pero de aquí al invierno todos tienen que tener un techo. Y la reconstrucción definitiva es algo que está a cargo de la ministra Toro, que después podrá contar más detalles de aquello.
Hay otra dimensión de la reconstrucción que es importante, la recuperación productiva. Hemos catastrado del orden de 450 micro, pequeñas y medianas empresas y cooperativas que han sufrido daños directos o indirectos por los incendios y que ya están catastradas por el Ministerio de Economía. Para ellos hemos habilitado un programa de emergencia de Sercotec de asistencia técnica y un subsidio de $10 millones y también un Programa Activa de Corfo que va a financiar hasta el 70%, o $40 millones, de un proyecto de inversión para la reactivación de estos emprendimientos.
También vamos a apoyar a quienes tenían negocios y estaban en una situación informal, que son más de 1.800 emprendedores, el clásico negocio del barrio, mediante un aporte del Fosis de hasta un $1 millón 100 mil pesos por afectado para la compra de máquinas, equipamientos, herramientas, insumos y entrega de apoyo para la formalización.
Estoy consciente de que, junto con resolver los problemas contingentes, hay que pensar también, porque sabemos que Chile es un país en donde los desastres ocurren con más frecuencia de la que nos gustaría, en soluciones definitivas. Por eso, insto e invito al Parlamento a legislar con prontitud la Ley de Incendios que se está tramitando en el Congreso y, además, la ley que crea el Servicio Nacional Forestal que reemplaza a la Conaf con nuevas funciones y competencias para la lucha contra los incendios.
Desde aquí, desde Quilpué, en la mañana en Viña del Mar y estaremos el miércoles nuevamente con la alcaldesa dando inicio al año escolar en Quilpué, reafirmo mi compromiso con las familias afectadas, con todos quienes lo han pasado mal, con quienes perdieron familiares, con quienes perdieron viviendas, con quienes perdieron su trabajo. Estamos aquí para estar con ustedes no con promesas vanas, sino con acciones concretas. A eso vinimos, sabemos que por eso nos van a juzgar. Y conversando con ustedes, con las personas que han sido golpeadas y afectadas, y trabajando con nuestro equipo en terreno es cómo vamos a poder ponernos de pie una vez más.
Muchísimas gracias a todos y a todas, y seguimos trabajando.