Discurso Verónica Calfullan Huenumán en la presentación del programa piloto Mi Primer Negocio Rural

5 DIC. 2023
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Discurso Verónica Calfullan Huenumán en la presentación del programa piloto Mi Primer Negocio Rural

Muy buenos días a todas y todos y muy en especial a quienes hoy represento, mujeres y hombres jóvenes que desarrollan actividades silvoagropecuarias en zonas rurales de nuestro país y, por supuesto, también, a nuestra máxima autoridad, el señor Presidente de la República, don Gabriel Boric Font, senadores y diputados, alcaldes y concejales de la región.
 
En primer lugar, quiero agradecer esta tremenda oportunidad que me brindan de poder dirigirme hacia ustedes y ser escuchada, que debo confesar jamás pensé poder tener. Espero, por cierto, representar a mis colegas agricultores de la mejor manera.
 
En 2016, junto a mi pareja e hija, regresamos desde Antofagasta y decidimos iniciar un nuevo camino que no esperábamos fuera tan difícil, donde las primeras dificultades fueron los accesos al predio. Comenzamos desde cero, sin agua, sin luz y, por supuesto, sin casa.  Por mucho tiempo, debimos trasladarnos a pie subiendo cerros para poder construir nuestro hogar porque el camino no permitía el ingreso de vehículos por sus malas condiciones.
 
En ese entonces, el apoyo de mi familia fue primordial, al transcurrir el tiempo me di cuenta que para ir resolviendo esa dificultad, en específico, era esencial vincularme con las organizaciones del lugar y logré llegar, gracias a la confianza que me entregaron mis vecinos, a la presidencia de la organización más importante del sector, la respetada “Comunidad Indígena de Hueima”. Gracias a lo anterior fue que comencé a involucrarme con otras entidades como municipio, Conadi y, por supuesto, Indap, que ha sido fundamental para lograr lo que hoy en día tenemos.
 
Son muchas las dificultades que enfrentamos los agricultores, como los ataques de puma a nuestros rebaños, el visón que ataca a las aves, plagas y enfermedades en los cultivos, jaurías de perros que dañan y matan a los animales. Pero a pesar de todo, jamás nos rendimos porque algunos amamos lo que hacemos y, otras veces, no nos queda más que asumir. 
 
Desde mi propia experiencia puedo decir que es sumamente difícil emprender cuando no hay redes de apoyo, porque muchas veces no se cuentan con los recursos económicos, conocimiento, herramientas o maquinarias para desarrollar cualquier actividad en el campo y lo único que se tiene son las ganas de trabajar en él y contribuir.
 
Estimadas autoridades, reconocemos y valoramos lo importante que es haber concretado un apoyo a los jóvenes rurales y que hayamos sido considerados como Región de Los Ríos para el desarrollo de este programa piloto que, sin duda, contribuirá a nuestros propósitos, pero nos preocupa la limitante de edad para ser considerado joven que son los 35 años.
 
Si usted, estimado Presidente, siendo joven, quisiera formar parte, no estaría dentro del rango que hoy se considera. Es por esto que lo invito a ocuparse y resolver porque ya hace bastante tiempo venimos escuchando que se está viendo el tema, pero no encontramos soluciones. La dificultad sólo siembra incertidumbre y muchas veces abandono a quienes estamos enfrentando el obstáculo y, en algunas ocasiones, en pleno crecimiento para consolidarnos en nuestras áreas.
 
Quisiera señalar y valorar la importancia de los jóvenes como líderes en el ámbito rural y, principalmente, el de las mujeres porque debemos asumir la responsabilidad de preparar un mejor futuro que vaya de la mano con el cuidado y respeto al medio ambiente, y, sobre todo, promover la soberanía y seguridad alimentaria.
 
Muchas veces nos sentimos discriminados porque sabemos que somos el 12% de población rural del país, sin embargo, los que ocupamos el mayor porcentaje del territorio. Por lo anterior, solicito a nuestro Presidente y parlamentarios presentes más consideraciones con nuestro sector, ya que es sumamente importante, bajo mi punto de vista, para que la zonas rural crezcan y se desarrollen, poner el foco en conectividad vial, con más recursos para pavimentaciones y conectividad comunicacional, con antenas de telefonías,  para entregar a los campesinos jóvenes la herramienta más utilizada que es el internet y, así, incentivar a ellos a quedarse y que no emigren a las ciudades,  y también disminuimos la brecha de desigualdad que existe entre los sectores rurales versus los urbanos en este ámbito, en específico.
 
Otra gran preocupación es el acceso y disponibilidad de agua para cualquier proceso productivo e, incluso, de consumo que con los años vemos drásticamente disminuido. Seamos todos responsables y cuidemos este valioso recurso. Sé que desde su posición como autoridades pueden generar nuevas iniciativas que nos permita disponer del agua que la agricultura requiere.
 
Para finalizar, quiero invitar y decir a todos aquellos jóvenes que aún no se atreven a transitar por este camino, súmense, que no estarán solos y construyamos juntos el futuro del campo chileno.
 
Espero, con mis palabras, haber contribuido a generar cambios e inspirado a otros jóvenes a permanecer con fuerza y valentía en el mundo rural.
 
Por su atención, muchísimas gracias.
 
 
Verónica Calfullán Huenumán