Presidente de la República, Gabriel Boric Font, junto al ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, hacen llamado para promover la inscripción de tutoras y tutores en el marco del Plan de Reactivación Educativa 2023.

3 MAY. 2023
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Presidente de la República, Gabriel Boric Font, junto al ministro de Educación, Marco  Antonio Ávila, hacen llamado para promover la inscripción de tutoras y tutores en el marco del Plan de Reactivación Educativa 2023.

Mateo, ¿puedo leer tu carta? ¿sí? ¿la puedo leer en voz alta? No la he leído yo todavía, así que lo que diga es sorpresa. Si es una crítica al Gobierno, éste es el momento.
 
Querido Presidente:
 
Quería contarle mi experiencia con Letra Libre junto a Belén Educa. Me sirvió mucho las actividades que realizaba con mi tutor Hans, eran divertidas y diferentes porque hacíamos juegos, hablábamos sobre lo que me costaba más y lo volvíamos a intentar hasta que yo aprendiera. Así lo hicimos dos veces por semana hasta que logré leer. Fue una linda experiencia donde lo pasé bien y, también, me reí y aprendí de otras formas, no estando en el colegio. Me gustaría que más niños pudieran hacer esto para repasar y lograr leer de una manera más divertida y con juegos.
 
Isabella, ¿puedo leer la tuya?
 
Presidente Gabriel Boric:
 
Mi nombre es Isabella Becerra y le quiero contar que participé en Letra Libre en donde me ayudaron a leer más rápido. Mi profesor se llamaba Matías Rodríguez y era muy entretenido. Quisiera que más niños tuvieran la oportunidad que tuve yo. Gracias a Letra Libre, ahora leo libros solita. Y a todos los niños y niñas que les cuesta leer, les recomiendo seguir practicando su lectura.
 
Isabella Becerra Matus, 3ero C, bandera magallánica.
 
Ivana, ¿puedo leerla? ¿me dejas? ¿sí?
 
Hola Presidente:
 
Mi nombre es Ivana Bracho. Soy una niña emigrante de Venezuela. Lo mejor que me ha pasado es estar en el Colegio San Juan y ser parte de la Fundación Conectando Aprendo, donde he aprendido mis debilidades y cada día aprendo y mejoro mis conocimientos. En mi país, cada día la educación se deteriora, por eso siento que aquí tengo la oportunidad de estudiar y tener una buena educación.
 
Muchas gracias, Ivana y a la mamá.
 
Muchísimas gracias por contarnos sus testimonios, sus testimonios dicen mucho más de lo que quizás o expresan más profundamente lo que yo pudiera decir acá. Pero creo que la mezcla de sus propias palabras, que estén de acuerdo y gracias por autorizarnos a leer sus cartas, y lo que dice María Luisa, es demasiado importante. Cómo en tiempos de tanta polarización, en tiempos de tantos reproches y ataques de lado y lado, hay cosas en que vale la pena ponernos de acuerdo y todos podemos trabajar juntos, sin importar las diferencias.
 
Gracias, María Luisa, por la generosidad, generosidad con el tiempo y, también, porque no es fácil asociarse a un programa del Gobierno. Muchas veces hay gente que se lo cuestiona y dice: “No, yo quiero estar lejos de la política”, pero la política al final se trata de mejorar la calidad de vida de nuestra gente, en particular de nuestros niños. Y esa cita que haces de Gabriela Mistral es tremendamente profunda y atraviesa yo creo que los corazones de todos los chilenos, y no solamente de los chilenos, de todos quienes habitan nuestro país. Me alegra demasiado contar con tu apoyo y el de más de mil personas que ya se han inscrito y veo que, además, hay fundaciones y universidades apoyando.
 
Siempre se dice que hacemos Patria cuando trabajamos en lugares muy lejos y hacer Patria puede ser también trabajar muy cerca, en el corazón de nuestra sociedad que es, justamente, el corazón de los niños y niñas que producto de algo que no es su culpa, que no es su responsabilidad, que no es responsabilidad de nadie específica que fue la pandemia, se pueden quedar atrás. Y depende de nosotros como sociedad y cómo desde el Gobierno logramos articular capacidades públicas con capacidades privadas para movernos en algo que nos lata con la misma fuerza el corazón.
 
Gracias, María Luisa, Rafaela, Ivana. Me llena de alegría ver los logros y cuando pienso en ustedes, cuando pienso en los cuentos que pueden leer solos o, como decía Rafaela, los cuentos que puede leerle a su familia. Imagínense gracias a estos programas cuántos cuentos más se van a leer, lo que significa no solamente la lectura de un cuento, sino también el momento de compartir en familia, el momento de encontrarse, la alegría de descifrar ese mundo que está detrás de las letras.
 
Yo creo que les he contado algunas veces vivía cuando chico, toda mi infancia y adolescencia en Punta Arenas, y en Punta Arenas en esa época había muy pocas librerías y, en general, las librerías eran solamente como de los libros Zig-Zag del colegio. Entonces, a mi papá le tocaba viajar a veces y cuando viajaba siempre me traía un libro o un casete. Y me acuerdo cuando me trajo “Sandokán” y “Los Piratas de la Malasia” de Emilio Salgari o los libros de Monteiro Lobato, y era una alegría saber que iba a poder viajar a un lugar que ni me imaginaba dónde quedaba, Malasia, un lugar demasiado extraño, pero abría el libro y sentía que viajaba. Y esa experiencia de viajar estando en un lugar que yo sentía tan remoto, tan desconectado, era un privilegio que hasta hoy no olvido. La idea de meterse al clóset como en Narnia e ir a otro mundo.
 
Y qué terrible que por deficiencia nuestra —esto me lo recordaba el Ministro, Ignacio Briones también me lo ha dicho—, de los adultos que no somos capaces a veces de ponernos de acuerdo de empujar algo, hay niños que se estén perdiendo esa oportunidad y todas las oportunidades que de ahí se derivan. No podemos permitírnoslo.
 
Ayer conversaba con una emprendedora y me decía que lo que más le duele, siendo que no es el área de su expertise, es la educación. Y en la educación en este tema, en la reactivación educativa, tenemos un espacio, miren la convocatoria linda que tenemos acá en este momento y esta convocatoria la debiéramos tener en todas partes; ésta es de las causas que pueden unir a Chile. Y cuánta falta nos hace la unidad para poder sacar adelante las cosas que valen la pena.
 
Ahora ¿en qué consiste? para que la gente sepa el Plan Nacional de Tutorías. Son dos líneas de trabajo.
 
En la primera hay estudiantes de pedagogía, de psicología, de trabajo social y de carreras afines que van a apoyar en sus estudios a los niños y niñas que más lo necesitan. Y esas experiencias, como bien decía María Luisa y como bien dejaban expresar los niños cuando los escuchábamos, también cambian vidas porque es una cuestión de ida y vuelta, no es solamente que el tutor esté enseñando, y es un descubrimiento muy bonito de la enseñanza, el tutor también aprende. El Mineduc está estableciendo convenios con universidades, centros de formación técnica e institutos profesionales.
 
Y la segunda línea son tutorías comunitarias con organizaciones de la sociedad civil. En general, todas las personas que quieran participar en esta cruzada nacional y cumplan con requisitos sencillos para reforzar el aprendizaje de estudiantes y que, de verdad, no le echemos la culpa al empedrado para que en un par de años más no digamos: “¿Por qué no hicimos esto?” Está en nuestras manos hacerlo, está en nuestras manos que nadie se quede atrás.
 
Quiero agradecer el gran compromiso de las Fundaciones Letra Libre y Conectando Aprendo —muchas gracias por esa tremenda pega, por el valor que tiene ese trabajo— que trabajarán en la ejecución de esta línea a partir de la experiencia que ya tienen en la labor de tutoría.
 
Y tal como decía María Luisa, quiero invitar a que quienes nos estén escuchando se animen y, como el mundo no termina solamente en nosotros, sino que somos comunidad, ser tutor o ser voluntario es una forma concreta de ayudar hoy a niños y niñas que necesitan su apoyo, es una manera muy concreta de construir un país mejor, un país más justo en donde pueden quebrar una línea y cambiar un futuro, es una forma de contribuir al desarrollo de Chile.
 
Las sesiones de tutoría duran una hora semanal, son tres meses y las personas seleccionadas van a recibir, por supuesto, todo el apoyo para poder llevar adelante este desafío.
 
Es muy importante ser claros, también lo decía María Luisa, en que esto no pretende, en ningún caso, reemplazar la labor fundamental, la labor especializada que realizan profesores y profesoras en las aulas de todo el país y que, durante la pandemia, pensaron fuera de la caja para mantener a los estudiantes vinculados, conectados.
 
Y esto se suma al Plan de Reactivación Educativa. El Plan de Reactivación Educativa está hoy en marcha y, además de centrarse en la recuperación de brechas, estamos preocupados de mejorar la convivencia en las escuelas.
 
En Chile hay 11.500 escuelas. No son noticia solamente un par de estudiantes que salen de un grupo chico de escuelas y que generan movilizaciones, que pueden ser legítimas, o que generan incidentes que no son legítimos. Son más de 11 mil comunidades educativas que están aprendiendo y en donde hemos logrado mejorar y disminuir la inasistencia grave de 35% a 22% entre marzo del 2022 y 2023. Es un número significativo, pero todavía falta mucho. Y, además, logramos aumentar la asistencia normal, —logramos, digo, con las comunidades educativas— y la asistencia destacada. Hoy el 70% de los estudiantes matriculados asisten a más del 90% de las clases.
 
¿Qué pasa con ese otro 30%? Es algo que nos tiene que conmover y mover porque son mejores cifras que las que teníamos el año pasado, pero son insuficientes. Y, por lo tanto, ahí tenemos una tremenda tarea en donde, además, estamos con el Programa de los Revinculadores para, justamente, volver a traer a los niños a las escuelas.
 
Estamos implementando herramientas para que los estudiantes tengan buenos niveles de asistencia, para que vuelvan a las aulas quienes las han dejado, para crear más cupos donde hubo problemas respecto a eso. Y, por ejemplo, está funcionando el Sistema de Monitoreo de Trayectorias Educativas y, desde este mes, se van a estar desplegando 1.300 profesionales y gestores territoriales para revincular estudiantes en todas las comunas de Chile. Eso es tremendamente importante.
 
Por ejemplo, está muy en boga el tema de la inseguridad, de la delincuencia. La manera más eficaz de combatir la delincuencia es no permitiéndole tener espacios donde crecer. Y, por lo tanto, el no entregar descampados, el preocuparnos de esos niños que han dejado de ir al colegio, el volver a motivarlos, el decirle: “Ustedes pueden”.
 
Ayer me decía Lorenzo Gazmuri de Icare que nunca es tarde para eso, a propósito de que me contaba que estaba haciendo clases en La Pintana y que un niño de 16 años también puede volver a aprender, también puede volver a ser parte de una comunidad valiosa.
 
Además, este año vamos a instalar 22 aulas de reingreso para alumnos y alumnas que estén retomando sus estudios o que tengan atraso en su escolaridad.
 
Quiero que sepan que nos vamos a jugar la vida en hacer que las escuelas sean un espacio donde niñas, niños y jóvenes alcancen los aprendizajes fundamentales para su futuro, pero también donde entendamos que juntos somos más fuertes, que cuando trabajamos unidos por una misma causa podemos lograr lo imposible y Chile está lleno, lleno, lleno de esos ejemplos.
 
Quiero invitar a las comunidades educativas, a los profesores, a las profesoras, a los equipos de gestión, a los sostenedores, a las madres padres y apoderados a ser suyo este plan y motivarse. Éstas son las cosas que le dan sentido a esta pega, a nuestra pega porque necesitamos el compromiso de la sociedad completa y no me cabe ninguna duda de que nadie se podría restar de algo de estas características.
 
Nos vamos a estar apoyando, vamos a estar monitoreando, yo personalmente voy a estar muy encima de esto porque me interesa, me motiva y ver la sonrisa de una niña que aprendió a leer, que puede leer un cuento y que puede contar un cuento, y la alegría de su familia cuando eso sucede, es algo impagable y que hace que todo, todo valga la pena.
 
Muchísimas gracias y cuenten con nosotros.