Presidente Piñera inaugura el Proyecto Traspaso Codelco Andina

19 ENE. 2022
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S.E. el Presidente de la República, Sebastián Piñera, junto al biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, inaugura el Proyecto Traspaso Codelco Andina, que permitirá asegurar la producción de cobre por los próximos 30 años.

Muy buenos días, señor Ministro de Minería y Energía, señor Presidente de Codelco, señor Alcalde de Los Andes, autoridades, pero por sobre todo quiero reconocer, valorar y agradecer lo que han hecho los trabajadores de Codelco.
 
Hay un dicho que dice “renovarse o morir” y la verdad es que Codelco enfrentó ese desafío porque sus grandes yacimientos que le habían dado vida durante largas décadas, todos ellos estaban llegando a una situación que requería una profunda renovación. Así ocurrió con Chuquicamata, que pasó de ser una mina a tajo abierto a una mina subterránea. Así ocurrió con El Teniente, que tuvo que buscar nuevas profundidades para seguir su explotación.
 
Y así ocurre con Andina que cuando cierre su mina subterránea, va a poder continuar adelante gracias a este proyecto de Sistema de Traspaso Andina. Creo que hay muy pocas empresas en el mundo que han enfrentado este desafío de renovarse, pero, al mismo tiempo, seguir manteniendo su producción y su aporte a Chile.
 
Además, veo con mucho agrado el correcto uso de la mascarilla. Quiero decirles que el día que nos saquemos las mascarillas tal vez no nos vamos a reconocer. Pero un mensaje de esperanza: yo creo que estamos avanzando a pie firme hacia una solución a este problema porque si bien estamos con esta variante Ómicron, que ha producido efectos devastadores en el mundo entero, Chile está bien protegido como lo demuestran las cifras que estamos viviendo hoy día de contagio, estamos en torno a los 9 mil. Hay países vecinos que han superado los 100 mil diarios y otros países que han superado el millón de contagios diarios.
 
Pero afortunadamente, por las protecciones que hemos tomado, el número de personas que se hospitalizan y el número de personas que pierden la vida se han mantenido constantes durante esta nueva variante de Ómicron.
 
Ahora, es verdad que Chile es un país que tiene una tradición minera y, de hecho, aquí en esta División de Andina siempre ha prevalecido ese espíritu innovador y aventurero de cientos y cientos de hombres y mujeres que, por muchas décadas, han desafiado este clima, esta geografía y esta altura, tal vez atraídos por este maravilloso paisaje, pero también motivados por la capacidad de generar riquezas y oportunidades para Chile.
 
Por eso si bien los primeros registros o intentos de explotar este yacimiento se remontan a los años 1920, la verdad es que fue en 1970, 50 años después cuando realmente se inician las faenas de esta División que es una de las más jóvenes de Codelco. Y por eso la juventud tiene que ser el gran impulso para seguir desarrollando una minería de cobre en nuestro país.
 
En esos tiempos, este proyecto cuando inició su construcción a fines de nuestro primer Gobierno el año 2013 y consideró, como decía el Presidente de Codelco, una inversión superior a los US$1.300 millones, también generó un gran impulso al trabajo en esta región, más de 3.500 trabajadores que trabajaban a 3.500 metros de altura disfrutando de este paisaje, pero también enfrentando las adversidades de un clima que en invierno, especialmente, se pone muy hostil. Lograron acumular 32 millones de horas hombre dedicadas a esta obra.
 
Y por eso a los autores de esta nueva vida para Andina, les quiero decir en nombre de todos los chilenos que los apreciamos, los valoramos y les agradecemos el trabajo que han realizado.
 
El principal objetivo de este proyecto es reemplaza la mina subterránea que está viviendo sus últimos tiempos por una mina a tajo abierto. Y esto significó remover 49 millones de toneladas de roca en un área de 44 hectáreas y construir una nueva planta de chancado que va a reemplazar a las actualmente existentes, una correa transportadora de más de 44 kilómetros.
 
Pero, tal vez, una de las grandes novedades es que este proyecto tiene estándares y exigencias ambientales del siglo XXI, del futuro. Y, por tanto, es un proyecto que aporta al concepto de una minería amistosa con el medio ambiente, amistosa con las comunidades y sustentable en el tiempo.
 
Además de eso, el proyecto tiene una sorprendente innovación que es este domo de 52 metros de altura, esta caverna de 70 mil metros cúbicos que va a permitir que la descarga de los camiones no genere partículas en el aire y, por tanto, sea respetuosa de la naturaleza y de la calidad de vida de todos los habitantes.
 
La correa transportadora es de tipo regenerativa porque tiene la capacidad de producir energía aprovechando las diferencias de altura entre sus dos extremos. Y gracias a este innovador sistema vamos a poder generar hasta 3,6 mega watts de energía a la red que alimenta esta faena.
 
La verdad es que la minería ha sido siempre parte de la historia de nuestro país y, por esa razón, es parte de nuestro ADN, es parte de nuestra identidad, pero tenemos que, también, junto con reconocer esa historia, mirar hacia el futuro y darnos cuenta que la forma en que hacemos las cosas o en que debemos hacer las cosas en estos tiempos nuevos tiene que ser radicalmente distinta.
 
Por esa razón, debemos adaptarnos a hacer las cosas de una manera distinta para poder enfrentar los grandes desafíos de nuestro tiempo como la crisis climática, como el calentamiento global, como la necesidad de una sociedad más sustentable.
 
Hay algunos, frente a esto, que plantean caminos distintos. Por esa razón, nosotros nos propusimos generar una política de Estado que generara acuerdos y convergencias que es la Política Nacional Minera que trazó un camino para la minería hasta el año 2050.
 
Y ese camino requiere, por una parte, recuperar el impulso y recuperar la participación que Chile ha tenido en el mercado del cobre y, al mismo tiempo, hacernos cargo de los nuevos desafíos y de las nuevas exigencias. Y, por esa razón, la política postula a transformar a Chile en un líder de una minería limpia, sustentable, amistosa con la naturaleza, amistosa con las comunidades.
 
Sin embargo, no cabe la menor duda que enfrentamos grandes obstáculos, pero es muy satisfactorio ver cómo, producto de esta política y también ayudados por el alto precio del cobre, Codelco está nuevamente generando niveles de excedentes como los que el país necesita para financiar tantas necesidades, especialmente en el campo social. Y eso significa que sí se puede tener una minería seria, responsable y, al mismo tiempo, eficiente y que provea recursos al Estado para satisfacer las necesidades de todos nuestros ciudadanos.
 
En esta materia, durante el año 2021 ingresaron 52 Proyectos de Evaluación Ambiental que representan una inversión que supera largamente los US$4.000 millones y se entregó durante este año Resolución de Calificación Ambiental favorable a más de 40 proyectos que representan una inversión que supera los US$ 6.300 millones.
 
Y, por tanto, la minería está viva, la minería está consciente de este doble desafío de generar riqueza y proteger el ambiente, y eso es una muy buena señal para un país que tiene esta historia y esta tradición minera.
 
Sin embargo, no cabe la menor duda de que hay personas, grupos, que tiene visiones distintas y la mejor forma de combatir o de confrontar las ideas de terminar con el extractivismo o las ideas de iniciar un proceso de decrecimiento es teniendo una minería limpia y respetuosa del medio ambiente y de las comunidades y teniendo un desarrollo inclusivo, integral y sustentable. Integral, que comprenda todas las áreas del quehacer humano. Inclusiva, que involucre a todos los ciudadanos. Y sustentable, que sea respetuosa con la naturaleza y con el medio ambiente.
 
Y ése es el gran desafío que Codelco está enfrentando y que hoy día con la inauguración de esta nueva planta en Andina estamos dando un gigantesco paso adelante para que todos los chilenos tengamos la oportunidad de poder desarrollar nuestros talentos, cumplir nuestros proyectos de vida y buscar la felicidad junto a nuestros seres queridos.
 
¡Larga vida a Andina! ¡Larga vida a Codelco!
 
Muchas gracias.