Presidente Piñera presenta el Plan Nacional de Prevención y Combate de Incendios Forestales

2 OCT 2019
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S.E. el Presidente de la República, Sebastián Piñera, junto a los ministros de Agricultura, Antonio Walker; de Defensa, Alberto Espina y de Obras Públicas, Alfredo Moreno, presenta el Plan Nacional de Prevención y Combate de Incendios Forestales 2019-2020. 

Muy buenos días, señores Ministros, señor Intendente, señores representantes de nuestras Fuerzas Armadas y de Orden y muy especialmente y con mucho cariño a los brigadistas que están formados y listos para enfrentar el desafío de proteger nuestros bosques.
 
Los bosques son vida, los bosques cuando están creciendo capturan CO2 y liberan oxígeno, exactamente lo contrario de lo que hacemos nosotros que respiramos oxígeno y devolvemos CO2 y, por tanto, permiten al planeta poder seguir en forma sana y segura su evolución.
 
Pero además los bosques cumplen muchos otros roles: son acumuladores de agua, son ajustadores y reguladores del clima, reducen la temperatura, aumentan las precipitaciones, son parte esencial de la vida de nuestro planeta.
 
Hace unos días, a Chile le tocó encabezar en el contexto de la Asamblea General de Naciones Unidas una alianza para proteger nuestros bosques lluviosos. Estamos pensando en la Amazonía, 7 millones de kilómetros cuadrados; en la Cuenca del Congo, 3 millones de metros cuadrados; en el Sudeste Asiático; y, también, yo pensaba en nuestros bosques, por ejemplo, los Bosques Valdivianos que son únicos en el mundo.
 
Y como la caridad empieza por casa nos estamos preparando desde hace mucho tiempo para enfrentar esta temporada de incendios forestales. Ésta va a ser una temporada difícil, porque las condiciones de sequía, de calor y también de mucho material combustible van a significar un desafío mayor que el que enfrentamos normalmente.
 
Pero también estamos mucho mejor preparados para enfrentar esta esta tarea y este desafío. El Plan Nacional de Prevención y Combate a los Incendios Forestales es un plan que no nace hoy día, es un plan que viene de muchos años y que se empieza a preparar y elaborar desde el mismo día en que termina la temporada de incendios del año anterior.
 
De hecho, hemos hecho un incremento muy significativo en el presupuesto para combatir los incendios. En el fondo, vamos a invertir 120 mil millones de pesos, más o menos la mitad el sector público, la otra mitad el sector privado, para poder tener todos los elementos, herramientas y sobre todo el equipo humano y la preparación de la comunidad para ser exitosos en esta guerra y combate a los incendios.
 
Estos 120 mil millones de pesos se van a invertir en un conjunto de herramientas, porque un incendio forestal es una tragedia. En Chile hemos conocido incendios forestales: recordamos todos lo que ocurrió el año 2017 cuando tuvimos una desproporción total en el número de tareas quemadas, llegamos a casi 700 mil. Ése fue un año excepcional; el año pasado logramos reducir significativamente, cerca de 70 mil hectáreas perdimos el año pasado, es decir, un décimo de lo que había sido ese año negro en la historia de los incendios forestales.
 
Y este año estamos calculando que vamos a estar en una cifra algo superior al año pasado, porque las condiciones son mucho más adversas. Más del 90% -y yo creo que bastante más- de los incendios forestales son producidos por la acción humana, alguna negligencia e irresponsabilidad que las podemos prevenir; otra simplemente maldad e intencionalidad que la tenemos que combatir. Porque la primera manera de prevenir un incendio es que nunca se produzca y para eso es muy importante educar a nuestra población a que sea más cuidadosa, a que sea más prudente, a que sea más responsable, que no deje fogatas semiprendidas, que no tire colillas de cigarrillo en los caminos, que no haga nada que no haría en su propia casa.
 
Y, por tanto, cuidemos nuestros bosques con el mismo cuidado que ponemos en el cuidado de nuestros hogares.
 
De hecho, estamos trabajando en base a la experiencia de los años anteriores, porque en esto hemos aprendido que la prevención es un instrumento fundamental, estar preparados y eso significa educar a la comunidad, eso significa anticipar los riesgos. Pero además de la prevención, cuando un incendio se produce a pesar de la prevención, lo clave es una reacción inmediata, oportuna. Se produce un incendio, si uno llega a tiempo, lo apaga inmediatamente; si llega a mitad de camino, es una tragedia; si llega tarde, es simplemente imposible de controlar.
 
Por eso la oportunidad, la rapidez, la velocidad y la coordinación que eso exige va a ser un elemento fundamental.
 
Este año -como yo decía- creemos que la superficie que vamos a estar exponiendo o que puede estar afectada por incendios fluctúa entre 80 mil -en una tesis optimista- y 120 mil -en una tesis pesimista-, o sea, una tremenda, tremenda responsabilidad.
 
Yo quiero hacer un llamado a todos mis compatriotas: cuidemos nuestros bosques, si más del 90% de los incendios son responsabilidad humana significa que, si fuéramos más cuidadosos, podríamos eliminar ese 90% de incendios. Y, por lo tanto, cuidemos de despejar el material combustible en torno a nuestras casas, cuando vayamos a compartir con la naturaleza no dejemos fogatas ni prendamos fogatas en lugares que no están autorizados, tengamos ese cuidado extremo de no provocar nosotros mismos incendios a nuestros propios bosques.
 
Ésa es una tarea de todos, pero, sin duda, que el Estado y el sector privado a través de CORMA, tiene una responsabilidad muy especial.
 
Por eso yo quiero mencionar que esta cultura de prevención que estamos creando en nuestro país la necesitamos en todas partes. El cambio climático, el calentamiento global requieren y exigen una cultura de mayor compromiso, de mayor prevención, de mayor cuidado y en el fondo este Plan de Combate a los Incendio Forestales contempla, en primer lugar, vamos a tener 2 mil 515 brigadistas, que son fundamentales en el combate a los incendios, a los cuales se van a sumar 3 mil 400 brigadistas del sector privado. Es decir, vamos a tener 5 mil brigadistas al pie del cañón, listos, preparados, entrenados y equipados para tener una fuerza humana de combate a los incendios.
 
Y quiero aprovechar de agradecer, valorar y apreciar el trabajo que hacen nuestros brigadistas. Además, muchos de ellos exponen sus vidas por combatir los incendios. Por eso, a los brigadistas, les quiero decir, a nombre de todos los chilenos, que apreciamos, valoramos y agradecemos lo que ustedes hacen por proteger nuestros bosques.
 
Pero, además de eso, vamos a tener 55 aeronaves; aviones y helicópteros; y a eso se suman 52 aeronaves del sector privado, es decir, 107 aviones y helicópteros van a estar disponibles –nunca antes habíamos tenido una flota de aviones y helicópteros como la que tenemos ahora– para combatir los incendios.
 
Y Chile en esto ha sido solidario, porque en este mismo instante hay aviones con pilotos chilenos combatiendo incendios en la Amazonía en Brasil y en Paraguay. Obviamente que ahora los necesitamos de vuelta porque -como dije al comienzo- la caridad empieza por casa: hemos ayudado a los países amigos como Brasil y Paraguay, pero ahora necesitamos todas nuestras fuerzas aquí en Chile, para combatir la temporada de incendios en nuestro país.
 
Pero, además de eso, vamos a tener todo tipo de vehículos especializados, algunos ustedes los están viendo: camiones, puestos de mando, camiones cisterna, para poder tener el equipamiento y, además del equipamiento, toda la tecnología. Por ejemplo, todos estos elementos de espumas que permiten potenciar el efecto del agua para apagar incendios, elementos retardantes, los tenemos disponibles.
 
Y, tal vez lo más importante de todo, es que vamos a contar con una colaboración total entre el sector privado y el sector público. De hecho, una buena parte de los incendios que se combaten, con la infraestructura, con los aviones, con los equipos humanos que provee CORMA, se hacen en terrenos que no son de empresa forestales. Esta colaboración, esta solidaridad; da lo mismo de quién es lo que se está quemando, tenemos que salvarle ese bosque a quienquiera sea su dueño y lo más importante es que el que esté más cerca vaya a combatir ese incendio.
 
Hoy día será el sector privado que ayuda a apagar un incendio en un lugar que no le corresponde, mañana será el sector público el que ayude al sector privado a apagar sus propios incendios forestales.
 
Y vamos a tener una tecnología muy importante como son los drones, 50 modernas cámaras robot con visión de 360° y 286 torres de vigilancia para prevenir, para anticipar los riesgos y para cuando se produzca un incendio tener una alerta y una reacción temprana y oportuna.
 
Todo eso exige una enorme preparación, planificación, entrenamiento y también muchos recursos.
 
Y, finalmente, en el plano de la prevención, CONAF ha hecho un trabajo maravilloso con las comunidades; hemos, a través de CONAF, tomado contacto, preparado y entrenado a más de 400 comunidades a lo largo y ancho de Chile para que ellas también sean la primera línea en el combate contra los incendios. Y eso, sin duda, va a ser un elemento fundamental y ONEMI, a través de todo el Sistema de Protección Civil, también está muy preparada para cumplir su rol.
 
Y, por supuesto, la colaboración de nuestras Fuerzas Armadas y nuestras Fuerzas de Orden que siempre que las necesitamos están presentes y las vamos a necesitar durante esta temporada de incendios.
 
Quiero agregar también que, en nuestro primer Gobierno, lanzamos una campaña que se llamaba “Un Chileno, un Árbol” y plantamos 18 millones de árboles, lo cual fue una meta que muchos creían imposible. Ahora estamos en una segunda etapa, en una nueva campaña de plantar 6 millones de árboles, pero una cosa es plantarlos y otra cosa es cuidarlos porque estos son árboles urbanos, que están en nuestras ciudades.
 
Por eso, en los próximos días o semanas vamos a presentar tres proyectos de ley: uno es una ley para proteger los árboles urbanos, para que la gente tome conciencia que son seres vivos, que hay que cuidarlos, hay que querernos y no hay que dejarlos abandonados y eso va a significar incentivos para que cada comunidad se haga cargo de los árboles que están en su propio territorio;
 
Lo segundo es un proyecto de ley de recuperación forestal, vamos a tener un fondo concursable para que aquellas personas o comunidades que vieron sus bosques quemados puedan recuperarlos a través de la reforestación;
 
Y lo tercero es una ley que va a modificar para potenciar la capacidad de nuestro país de recuperar su bosque nativo.
 
Chile tiene aproximadamente 14 y medio millones de hectáreas de bosques, de los cuales la inmensa mayoría son bosques nativos y los bosques nativos tienen un valor único. Por lo pronto, son mucho más efectivos que los bosques exóticos en capturar CO2 y liberar oxígeno, y además son parte de nuestra tradición, de nuestra cultura, de nuestra forma de ser. Por eso el cuidado del bosque nativo va a ser la preocupación central de este tercer proyecto de ley.
 
Quiero terminar estas palabras diciéndoles a mis compatriotas: estamos preparados, nos hemos preparado durante meses, tenemos ahí los presupuestos, los brigadistas, los aviones, los helicópteros, las torres de vigilancia, la tecnología, los drones, pero necesitamos el apoyo y el compromiso de todos y cada uno de nuestros compatriotas. Ayúdennos para que esta temporada tengamos los menores incendios forestales posibles.
 
Y eso va a ser el mejor regalo que podemos hacerle a nuestro país, pero sobre todo a nuestros hijos, a nuestros nietos que también quieren poder disfrutar de estos bosques.
 
Termino diciendo que quiero apreciar, valorar y agradecer la decisión que tomó una mayoría de Diputados el día de ayer, que rechazó una Acusación Constitucional contra la Ministra Marcela Cubillos, que no tenía fundamentos y que estaba desnaturalizando nuestro orden constitucional, y también decirles que a partir de ahora la Ministra, el Ministerio, el Gobierno y este Presidente vamos a poner todo nuestro esfuerzo y nuestra preocupación en la gran tarea, la gran batalla, la madre de todas las batallas que es darles a todos, todos y cada uno de nuestros niños y jóvenes una educación de calidad.
 
Muchas gracias.